Finca cafetera el edén

Tuve el privilegio de visitar esta hermosa finca cafetera, en una tarde cálida y hermosa, allí me recibió doña María Helena Londoño, dueña de dicha finca, ubicada vía Morelia, en la vereda El Edén.

Al llegar a este lugar, vi lo hermoso que puede llegar hacer nuestro campo, sentí que el verde de sus montañas, me deslumbraban la vista,  el exuberante de su vegetación me llenaban de esperanza ya que casi no vemos esto en la ciudad porque se nos está agotando, y sobre todo un ambiente de tranquilidad, que me hizo pensar, que vivimos en mucho estrés, que este lugar es mágico, que se siente tranquilidad, el tiempo pasa lento.

Es sorprendente dar un paseo por este lugar, porque encuentras tanto que ver tanto que hacer y sin  necesidad de recurrir a ninguna tecnología como lo hacemos en la ciudad, y es que  ese lugar  no se usa el computador, ni mucho menos el internet eso aquí no es primordial, como  lo es para nosotros, no aquí se te cosecha, se riegan las plantas, se alimentan las gallinas, se alimentan los cerdos, y todo el día es en función de estos, y en la tarde tuve el privilegio de recorrer esta hermosa finca cafetera, y me encontré con grandes árboles, Hermosas aves, cultivos de aguacates naranjas, plátanos , mandarinas, papaya , que la misma señora ha sembrado en el transcurso de los años y que hoy por hoy  le producen frutos, pero no podemos dejar a tras, los palos de café, que ella con su agregado recolectan y llevan a la asociación de caficultores ya que ella pertenece a esta, y es por eso que es una experta en el tema, y es que el recorrer esta finca y sentir el rico aroma del café recién recolectado, o del que ya está secando, pero aun mejor el de una rica taza de  café es una gran experiencia, porque te puedes der cuenta de que es un excelente café.

 Esta finca, tiene una espectacular  vista, desde allí se ve la finca de turismo rural y cafetera llamada, (Villa Marta) que tuvimos el placer de visitar el año pasado los estudiantes de turismos  de primer semestre de la UTP.

La casa de esta finca es una casa grande y acogedora, típica casa de finca, tiene un salón gigante, donde toda la familia se reúne los fines de semana y en las festividades, las habitaciones quedan alrededor de este salón, al igual que la cocina  y los baños, de verdad que es muy agradable estar allí.

Y sin dejar atrás la experiencia vivida con la dueña de la finca, una mujer berraca como diríamos nosotros, con empuje y muy sabia, me dijo yo vivo feliz en este lugar, y empezó a contarme diferentes anécdotas vividas en su finca, cuando sus hijas eran solo unas niñas, me sumergí en aquellas historias tan verdaderas y tan bonitas que hoy en día vive con sus nietos, con ella tienes mucho de qué hablar, y temas muy interesantes, como por ejemplo como era en un inicio este lugar, sin mucho que ofrecer, y como poco a poco ella la ha ido transformando en lo que es, una gran finca cafetera, que le proporciona trabajo  a mas de 7 personas, las cuales tienes familia, esto me parece muy importante.

En este lugar aprendí mucho y me sentí muy bien, ojala y pronto pueda volver a visitar este lugar.